CONSTELACIONES FAMILIARES, Dr. Arturo Vinuesa Sáenz
Sábado 21 diciembre Estella-Lizarra
Domingo 22 diciembre Zarautz
Inversión: 75€ por Constelar. Info y reservas: 695 361 783
Las Constelaciones Familiares son una terapia grupal (aunque, en ocasiones, se hace de forma individual) que nos va ayudar a darnos cuenta de las dinámicas y desordenadas familiares, que muchas veces condicionan nuestra vida...
Una familia es un grupo de personas cuyo proyecto común es dar continuidad a la vida y al amor. Todos los miembros de un sistema familiar están vinculados de forma invisible e inconsciente y estos vínculos a veces no son claros, se bloquean o simplemente se cortan en momentos en los que alguien de la familia tiene un gran sufrimiento que no puede expresar.
Por ejemplo: muertes tempranas (niños, abortos...), hechos de guerra, asesinatos, abandonos, herencias que separan familias, niños adoptados o no reconocidos, incestos, separaciones traumáticas, secretos, etc...
Estos hechos pueden generar un bloqueo importante, si son vividos desde el dolor no expresado, desde la impotencia y sin solución posible. Estos traumas, si no son sanados en su origen, pueden "heredarse" y transmitirse de alguna manera a un descendiente de generaciones posteriores...repitiéndose el trauma para, de alguna manera, dar la posibilidad de sanar al sistema familiar...
¿Como se realiza este trabajo?
Una constelación familiar se crea para aclarar un problema que me preocupa: puede ser una enfermedad, un problema de pareja, una mala relación entre padres-hijos o entre hermanos, un tema laboral, etc...y se hace a través de representantes, es decir, los mismos participantes del grupo son elegidos para hacer de los miembros de la familia...a través de la energía del sistema familiar y del lenguaje no verbal. El facilitador puede interpretar y ver donde esta el problema sistémico que tiene que ver con la persona que constela.
El alcance del trabajo no se limita a la persona que realiza su constelación, sino que también afecta a todo su sistema familiar, ya que cuando una persona se recoloca, también los demás deben hacerlo, para crear un nuevo y más sano equilibrio sistémico.